Rara vez pensamos en la vida de un piano. Aún entre personas que poco saben de música clásica, algunas saben que un violín Stradivarius –por ejemplo- es algo muy especial, precioso, atesorado por los cuerdistas. Y algunas de esas personas saben que un piano Steinway es considerado por nosotros los pianistas como algo muy especial y precioso.
Pero pocas personas –incluso a veces entre los propios músicos-- piensan en la VIDA de los pianos. ¿Cuántos años vive? ¿Qué son los factores que afectan su salud? ¿Cómo debemos de cuidar un piano para que su vida se prolongue lo máximo posible? Pensamos en cuestiones así casi todos los días en cuanto a nuestros propios cuerpos, pero rara vez referente a un piano.
Por eso estoy aquí: porque uno de mis pianos más queridos, el Steinway de Casa Cuatro, necesita un poco de atención para prolongar su vida. Para que pueda seguir dando mucho placer a muchos escuchas en nuestra ciudad. Por eso les escribo ahora, y les escribiré cada rato hasta que hayamos recaudado los cuarenta mil pesos necesarios. Sip, no miento: son treinta mil para hacer el mantenimiento que ahora urge; más otros diez para darle buen arranque a un fondo
permanente de mantenimiento.
Con esta finalidad varios músicos de aquí hemos ofrecido dar conciertos a beneficio de la salud de nuestro querido Steinway. El primerísimo es este sábado 25 de noviembre, con dos talentosos intérpretes de la nueva generación: el violinista Sergio González y el pianista Jacobo Cerda, que juntos conforman el Dueto Cerda-González. Yo ofreceré algo en enero, y así iremos paso por paso. Todo lo recaudado en estos conciertos se donará de forma íntegra al Fondo de Mantenimiento del Steinway; es decir, los músicos tocarán absolutamente gratis.
Cierto está: representa un monto simbólico para decir que todo cuanto donativo importa, por pequeño que sea: porque el boleto cuesta 80 pesos y para maestros e INAPAM, 50. De allí este mensaje mío, para animar a melómanos más afortunados a que hagan una contribución más sustanciosa. En realidad, si cada una de cien personas hiciera un donativo de 400 pesos, ya estaríamos. O doscientas personas, un apoyo de 200 pesos cada una. ¿Ya ves … ?
¡Que vengan pasado mañana para el primero de estos conciertos a beneficio de este instrumento que durante sus casi cinco años en Casa Cuatro ha dado tanto placer a tantas personas, y que apoyen lo más que puedan! Si pueden llegar con 200 pesos en la mano, mejor que mejor ... o incluso más si te sientes agradecido por la programación musical que Casa Cuatro sigue haciendo. En caso de no poder venir al concierto, un donativo siempre se recibe agradecidamente en la oficina, por Hetzmek.