VALE, MI CONCIERTO, POR FIN:
El martes 31, mi concierto. Hay que decir que este foro, el Teatro Pedro II de Ribeirao Preto, tiene fama de la mejor acústica de este inmenso país. Yo no sé si es la mejor del país entero pero sí que es fenomenal: cálida, íntima, responsiva. Además de un Steinway de cola completa en esplendorosa condición. Todo el teatro en bellísimamente restaurado y mantenido. Butacas, camerinos, TODO.
De entrada estuve en un estado un poco esquizofrénico, con el estreno absoluto de nueve de las piezas Monarca en el Cervantino a apenas seis semanas. Supongo que pudiera haber escogido un programa fácil … pero parece que a estas alturas poco talento tengo para eso. Además, la obra de Silvia Cabrera Berg, Autumn [Otoño] es una obra grande, de mucha envergadura, de arquitectura y de virtuosismo: no pareció justo rodearla con piezas de menor estatura. Este Coloquio a que soy invitada se llama Submodernidades y tiene por tema central la cuestión de la música contemporánea erudita (no me encanta el término pero ahora no es el momento para esa discusión) y su futuro. Desde el inicio decidí armar un programa mixto, otro de Generaciones, trazando líneas de conexión entre música de hoy y algunos de sus antepasados. La música de hoy: Autumn de Cabrera Berg y de compositores de México.
¿Y la música de México? En este año bicentenario muchos de mis colegas se están enfocando en música de Manuel M. Ponce, de Ricardo Castro, de otros compositores del siglo entre 1810 (Independencia) y 1910 (Revolución) y tantito más. Admiro esta labor, de que mucha sigue siendo una de rescate y por lo tanto más importante aún.
Al mismo tiempo la programación de la música de grandes creadores con vida es escasísima, sobre todo en el exterior. Y es música que a mí me encanta, igual como la de CPE o de Brahms … y que a todas luces amplísimamente merece la mayor difusión posible. Con que resulta imprescindible tocar el estreno en Brasil de Días de Mar y Río de Arturo Márquez; y de la Flor Robada #2 (Arabesco) de Marcela Rodríguez. Silvia me pide que incluyera unas piezas de Rumor de Páramo de las que interpreté aquí en marzo del 2009 –en particular Ibarra y Derbez– así que añado a éstas Ecos del llano de nuestro querido Ramón Montes de Oca, que también sería estreno en Brasil. Quedó así, y doy los detalles porque dos días después en mi conferencia volví a precisamente este tema, de la selección de repertorio y la lógica detrás de este programa:
CPE Bach Sonata Kenner und Liebhaber en re menor, W.57/4 (III, 4)
Marcela Rodríguez Flor Robada #2 (Arabesco) (estreno en Brasil)
Silvia Cabrera Berg Autumn (estreno absoluto)
Pausa
Tres piezas de Rumor de Páramo:
Georgina Derbez Del viento, la esperanza
Federico Ibarra Páramo pétreo
Ramón Montes de Oca Ecos del llano (estreno en Brasil)
Joh. Brahms Klavierstücke Opus 118 I, II y VI
Arturo Márquez Días de mar y Río (estreno en Brasil)
La respuesta del público fue extraordinariamente cálida. Mientras tocaba sentí aquella singular energía que surge sólo de la más completa concentración por parte de los escuchas. Y cuando toqué esa última nota de Márquez –el do más grave del piano, apenas un susurro, juro que es la nota más difícil de toda la obra– ESPERARON a que se esfumara a que irrumpieron en aplausos. Se pararon. Salí del escenario después de muchas caravanas. Y no quisieron. Me llamaron de vuelta. Así que no me quedó más remedio: toqué el bis que tenía conmigo, y sí es de Ponce: Plenilunio. De su inagotable veta más popular, y hermosísima. Y así fue que cumplí también con la labor de rescate además de tocar música de hoy.
Después, una caipirinha rapsódicamente deliciosa en el famoso Pinguim, archi-bien situado al mero lado del Teatro, un también delicioso sandwich … y al hotel, a dormir como bebé.